Sábado de fútbol en Villafranca. El Carnaval ha obligado a cambiar los horarios habituales. El equipo de Regional Preferente jugará frente al San Jorge a las 16 horas del sábado, con el fin de que los espectadores puedan disfrutar después del desfile del carnaval.
Por su parte, el equipo juvenil se enfrenta al Mérida UD el sábado en la matinal (12 horas) en el campo de césped artificil. En relación a éste equipo, el portero Damián Morenas se recupera en casa del susto que sufrió el pasado fin de semana en Badajoz.
En declaraciones al diario HOY, el joven el pasado sábado le salvó la vida asegura que no es un héroe. Recogemos íntegra la información por su interés:
Dicen quienes le conocen que José María Cantero es un «tío echado para adelante». Tal vez esa valentía para afrontar la vida haya salvado de la muerte al portero del Villafranca juvenil Damián, quien cayó al suelo este sábado en el campo del Guadalupe en un estremecedor golpe. Sus piernas comenzaron a tener convulsiones y su cara se coloreaba de morado a causa de la asfixia al tragarse la lengua. Cuando su vida pendía de un hilo, y ante la impotencia y el silencio tenso de los allí presentes, apareció de la grada Cantero, un celador sin las virtudes de un médico pero con el arrojo suficiente para poner en práctica lo que alguien le enseñó hace tiempo: cómo utilizar el famoso tubo de Guedel, un artilugio que habrá alejado de los cementerios a muchos deportistas que se hubieran asfixiado con su lengua. Ese maestro era Juan Carretero, médico del Flecha Negra, equipo que ha vivido de cerca un caso casi idéntico al de Damián (Richard, en septiembre de 2006) y donde entrenó hace años el protagonista de esta historia.«Hubo un choque fortuito. Se alarmaron mucho en el campo.
El entrenador y los jugadores no eran capaces de meterle la mano en la lengua y encontré en el botiquín un tubo de Guedel, ví que tenía la lengua muy introducida y con los dedos colocados como boquilla se lo fui poniendo. Recuperó un poco el color y lo incorporamos un poco para que respirara mejor hasta que viniera la ambulancia. Todo el mundo mira en esos momentos pero nadie sabe qué hacer. Fue una suerte encontrar el tubo porque con las manos hubiera sido complicado. La gente estaba desolada. El silencio es horroroso porque algo tan bonito como el fútbol puede convertirse en tragedia», comenta Cantero.Descansar un pocoPor suerte, no había familiares de Damián en el campo, por lo que no vieron lo peor. Los padres comprobaron su estado en el hospital, antes de que le hicieran un Tac, cuando lo peor ya había pasado. Como prevención le practicaron algunas pruebas y lo mandaron a casa para descansar. Ya está recuperado, según su entrenador, y lo irónico es que él no se habrá enterado de casi nada. «Está claro que no soy médico, pero me aproveché de lo que aprendo en mi entorno y de lo que me enseñaron en el Flecha cuando era entrenador. Sabía la teoría y me faltaba la práctica, que ha sido aterradora. Ha sido una coincidencia de la vida que me encontrara en el campo para ayudarle».
Preguntado sobre si se considera un héroe, responde tajante: «En absoluto. No soy un héroe, fue sólo una coincidencia. Lo que sí me ha hecho esta experiencia es ser más precavido, ir a los sitios más preparado y, sobre todo, intentar ayudar a la gente en lo que pueda. No quiero pensar lo que hubiera pasado de no estar yo allí y puede que le salvara la vida, pero no creo que sea un héroe por eso».No héroe, sí murgueroJosé María, nacido en Badajoz hace 35 años, entiende que no sea posible tener especialistas en todos los campos de fútbol, pero sí propugna que haya un botiquín y formación para entrenadores y personas de cada club para que sepan un mínimo con el que actuar en estas situaciones.
Tras quitarse su disfraz de héroe, hoy miércoles al celador del Perpetuo Socorro le toca ponerse el de la murga 'Deakipakasa', con la que actúa esta noche en las semifinales del concurso en el Teatro López de Ayala. Una murga con gran inspiración futbolística en la que, según avisa, se trata mucho el recurrente asunto de la crisis económica.La familia de Damián y el club ya le han expresado sus agradecimientos y José María ha prometido que irá a Villafranca para verle en el próximo partido. Si el joven meta villafranqués juega, lo hará más tranquilo porque sabrá que su 'ángel de la guarda de carne y hueso' está en la grada.
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